LA OTRA CARA FRENTE AL COVID-19

1 de abril de 2020

Aplaudimos todos los días a las 19:00 en agradecimiento a todos esos valientes que, por suerte o por desgracia -lo dejamos a su juicio- se levantan todos los días para cumplir con su jornada laboral en el sector sanitario, alimentario, de seguridad o limpieza, entre otros.

Desde Probosco queremos destacar que entre esos héroes también hay personas con discapacidad intelectual o del desarrollo poniendo su grano de arena para que, en plena crisis del COVID-19, el resto del mundo que debe someterse al confinamiento pueda gozar de salud, alimentos y seguridad.

Hace unos días, el periódico La Vanguardia hizo eco de la campaña para dar visibilidad a estas personas de La Ciudad Accesible, el laboratorio-observatorio de inclusión social promovido y gestionado por la Asociación Sí Podemos. El objetivo es muy sencillo: recordar al mundo entero que las personas con discapacidad puedan ser también “agentes activos” en esta crisis, y no solo como personal pasivo y receptor de servicios y cuidados. Debemos hacer hincapié en que son ciudadanos de pleno derecho que, aparte de reclamar sus derechos, también cumplen con sus obligaciones como cualquier ciudadano más.

Por otro lado,Down Madrid ha querido también ayudar en este recordatorio mediante una nota de prensa. En ella podemos leer la historia de Raúl Sánchez, trabajador en una residencia militar que desde hace una semana se ha convertido en un hospital de campaña donde se alojan pacientes con coronavirus que deben estar en cuarentena. O la de Ángel Moraga, encargado de la recogida de cestas y productos en el Carrefour, que asegura estar tranquilo mientras desempeña su labor por las medidas de seguridad que le ofrece su empresa. Por supuesto, ni una de todas las personas con discapacidad intelectual que continúan trabajando tienen patologías que les hagan vulnerables al virus. De ser así, habrían sido enviados a casa al ser considerados personas de riesgo, pero seguirían siendo héroes, como todos los que estamos soportando el chaparrón desde el confinamiento.

Carolina Méndez. Periodista. EQUIPO PROBOSCO